Él es un señor moderno,
elegante.
Siempre se sienta al lado de una escalera,
elegante.
Lleva unas gafas de espejo,
elegantes.
Escucha una radio diminuta…
¡una hermosura!
Y cuando nos ve, mueve la cintura
con soltura.
Dice que está feliz de poder bailar:
¡brazos!
De girar, subir y bajar:
¡pies!
Suena una de rock o un cha-cha-chá…
¡vuelta!
Y nos choca las manos,
arriba y abajo.Y dice que la edad no está en el cuerpo,
sino en la cabeza.